Un día de celebración, de hermanamiento. Nuestro santo que durante el resto de los 365 días del año nos protege y nos guarda a todos los compañeros conductores.
Además, es un día en el que podemos "pitar" libremente por el centro de Guadalajara y alegrar a los niños y niñas que con expresión de asombro nos miran a nuestro paso. También ese día despertamos a algún perezoso y a algún fiestero que llega a su casa tarde (o pronto por la mañana, que decía mi madre)
Esta imagen fue una sorpresa, Isabel y Fernando nos la tomaron y nos la hicieron llegar por mail, sin conocerles, y ahora tenemos muchas ganas de conocerlos y poderles agradecer este REGALO que para nosotros es MUY ESPECIAL.
El Señor Braulio Carles, ese día hace doblete: y es que además de oficiar la misa especial en San Gines de San Cristóbal, por unas horas forma parte de la plantilla de Ramos Bus.